Elegir al candidato más capacitado para llevar a cabo una determinada labor en un grupo determinado de trabajo es, sin duda alguna, la tarea más complicada a la que se enfrenta cualquier departamento de recursos humanos.
Uno de los errores que más repiten los encargados de selección de personal de nuevo cuño es el que les lleva a tratar de contratar al “mejor” candidato, en lugar de optar por aquella persona que, en términos absolutos, mejor encaja en las necesidades de un determinado proyecto empresarial.
Y es que muchas empresas tienen problemas para diferenciar los conceptos reclutar (proceso de atracción de candidatos con el perfil que la empresa necesita cubrir determinadas necesidades) y seleccionar (todas las acciones encaminadas a escoger la mejor candidatura a través de distintas pruebas).
Consejos para seleccionar los mejores candidatos
-Tener muy claro qué tipo de empleado necesitamos. Si se necesita una administrativa se pondrá en marcha un proceso de selección distinto de si se requiere un ingeniero técnico. Personalizar el proceso de elección nos acercará al éxito.
-Para poder acertar en la elección del candidato más idóneo para el puesto que deseamos cubrir necesitaremos atraer a los mejores perfiles. Algo que podemos realizar tanto interna como externamente. En ambos casos deberemos tratar de conocer a fondo la personalidad del candidato, conocer sus conocimientos y competencias, tener presentes sus intereses y aspiraciones y evaluar su capacidad de adaptación a nuestro entorno.
-Más allá de un exhaustivo análisis del currículum vitae, para determinados puestos de trabajo, es importante servirse de tests psicotécnicos y otros exámenes para evaluar los conocimientos y aptitudes de los candidatos. Todos ellos actuarán de complemento perfecto de la entrevista personal.
-Tener siempre abiertos los procesos de selección de candidatos. Sobre todo de aquellos perfiles que detectamos como más rotativos. Para publicar ofertas de empleo, además de portales especializados, también podemos echar mano de las principales redes sociales.
-En el caso de no contar con un departamento de selección de personal, como tal, como sucede en la mayor parte de los casos, lo ideal es ponerse en manos de empresas especialistas en procesos de selección para asegurarnos así de que este se desarrolla de la manera más diligente y acorde a nuestros intereses posible.
-En los procesos de selección temporal, es decir, aquellos que abrimos para cubrir una necesidad de manera eventual, ya sea para un evento concreto o por una baja, deberemos ser capaces de poner en marcha un proceso de selección simplificado, mucho más ágil e igual de certero en busca de la persona idónea.
-Es capital tener muy presente que no podemos de trabajar en nuestra imagen de marca, toda vez es esta la que actúa como tarjeta de presentación entre aquellos profesionales a los que queremos atraer en busca de la criba que nos ofrezca al mejor candidato. Labrarse una imagen de una empresa profesional, con una cara amable para con sus empleados y que se erige como un lugar estupendo para desarrollarse profesionalmente es imprescindible para atraer al talento que cada proyecto empresarial necesita.
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